Los lugares donde disfrutar de cielos oscuros en todo su esplendor están desapareciendo por culpa de la contaminación lumínica. NixNox surge como iniciativa de la Sociedad Española de Astronomía (SEA) como proyecto común entre astrónomos aficionados y profesionales (Pro-Am) para catalogar y caracterizar lugares donde observar el cielo con la familia o amigos. Se trata de animar a la sociedad a disfrutar de esos espacios e incentivar a las administraciones públicas para que los valoren y los preserven.
Nadie mejor capacitado que los astrónomos aficionados para llevar a cabo esta tarea, por eso las asociaciones de astrónomos realizaron las primeras observaciones siguiendo un protocolo de medidas de todo el cielo (el método NixNox) que permiten construir mapas all-sky. Se recopiló información de los lugare donde suelen ir a observar los aficionados, y que sean de fácil acceso. Los astrónomos nos facilitan las medidas de brillo del cielo, información sobre el lugar y fotografías tanto diurnas como nocturnas que permiten al posible visitante hacerse una idea de la calidad del sitio.
La Universidad Complutense de Madrid está liderando este esfuerzo común (proyecto de ciencia ciudadana o Pro-AM) para motivar a la sociedad en el cuidado de la calidad del cielo nocturno. La fundación STARS4ALL incluyó este proyecto dentro de sus iniciativas de contaminación lumínica.
El proyecto se ha extendido de manera que también nos interesan observaciones en lugares menos oscuros incluso cerca de grandes ciudades que no son ideales para observaciones astronómicas pero que informan de la contaminación lumínica del entorno. El interés científico de estas medidas es la comparación con modelos de difusión de la contaminación lumínica por la atmósfera. Las observaciones NixNox permiten afinar los modelos que ayudarán a estimar cómo son los cielos en lugares remotos donde no necesitaremos ir a medir y predecir cómo serían los cielos de lugares contaminados si apagamos o disminuimos algunos focos de contaminación.
Cuando buscamos un lugar para la observación astronómica nos fijamos en el brillo del cielo en el cénit pero también en los horizontes. La mayor contribución al abrillantamiento del cielo procede de los horizontes y precisamente en las direcciones en las que se encuentran los mayores y más cercanos focos contaminantes. De manera inmediata lo apreciamos en las fotografías nocturnas obtenidas con una cámara de fotos dotada de objetivo de ojo de pez. Esta combinación instrumental proporciona imágenes de todo el cielo, es decir de la bóveda celeste por encima del horizonte. Las regiones brillantes de las fotos indican la dirección de los focos contaminantes.
Con un fotómetro de mano como el SQM o el TESS-P se apunta en una red de posiciones en la bóveda celeste. Eso permite construir un mapa de brillo del cielo en todas direcciones. Este método (NixNox procedure to build Night Sky Brightness maps from SQM photometers observations) es una alternativa barata al uso de cámaras all-sky calibradas que son muy costosas. Con las medidas de brillo de cielo que nos aportan nuestros colaboradores elaboramos mapas que caracterizan la contaminación lumínica del lugar de observación y aportan información de las direcciones donde se encuentran las fuentes que más contribuyen al deterioro de la oscuridad del cielo.
Con los fotómetros de mano SQM o TESS-P se obtiene una medida instantánea del brillo del cielo nocturno sin más que apuntar, apretar el botón y leer el resultado. Con un pequeño montaje sobre trípode fotográfico y algo de paciencia se puede obtener una tabla de valores que permiten confeccionar un mapa con valores de brillo para todo el cielo. Pero las medidas individuales usando un fotómetro de mano y anotando las medidas en cada dirección es un proceso laborioso que exige mucho tiempo y destreza.
Por este motivo desarrollamos el fotómetro TAS (TESS auto scan) que realiza de manera automática el barrido del cielo y almacena los resultados para su posterior procesado.